Pâris Mouratoglou y David Corchia crean el Grupo EREN, cuya vocación es desplegar una amplia gama de soluciones para reducir la huella carbono de numerosos sectores industriales. El Grupo se dota naturalmente de una filial (EREN RE) dedicada al desarrollo, la financiación y la construcción de centrales de energía renovable. Elije situarse estratégicamente centrada en los países que gozan de un recurso eólico o solar abundante, de estar en condiciones de producir electricidad a un coste que sea competitivo, sin que necesite una subvención. El grupo se desarrolla así rápidamente en Grecia, en Portugal y en otros países europeos, además de en India, en Latinoamérica, en África, en Asia, en Australia…